Los diagnósticos de declinación estadounidense destacan la regresión monetaria e industrial y el endeudamiento externo del paÃs. Pero analizan la economÃa norteamericana con los mismos parámetros de cualquier otro paÃs, olvidando el papel primordial de la primera potencia en la reproducción del capital global. Esa centralidad se verifica en la primacÃa de las finanzas estadounidenses.
El dólar ha perdido su reinado mundial, pero ninguna otra divisas se perfila como reemplazante y en las situaciones de crisis es el refugio más apetecido. El endeudamiento norteamericano es sostenido por varias potencias exportadoras. Para comprender el rol de una economÃa imperial hay que superar la perspectiva nacional comparativa.