En las primeras dos décadas del presente siglo se ha hecho evidente la diversidad de un cristianismo que a lo largo del siglo pasado se presentaba oficialmente uniforme o apenas en dos facetas, una católica mayoritaria y otra evangélica de origen protestante y pentecostal. En ambos casos la práctica religiosa parecía ajustarse a su forma institucional. Este texto revisa la literatura reciente, los datos censales y estudios de caso sobre las formas variadas de los cristianismos. Se sostiene que el campo cristiano contemporáneo se presenta inéditamente diverso y plural. Se analiza el fenómeno en los tres más grandes países de América Latina, Brasil, México y Argentina. En seguida se estudia los datos regionales que permiten ampliar la perspectiva a toda la región y, finalmente se reflexiona sobre las “nuevas comunidades católicas” como factor de pluralización.