Puerto Rico’s higher education is going through a very special process. The University of
Puerto Rico, which is the state university system, has recently experienced strikes and work
stoppages due to a tuition increase which has been rejected by its students. In the meantime,
the Governor has named a citizens commission that should work on a new University Law
that will probably do away with students and Faculty rights to participate in its most
important processes. Puerto Rico’s experience with educational institutions, starting with the
Spanish “conquistaâ€, followed by the 1898 US invasion, and culminating with the economical
crises that the country has had to confront in this early twenty first century, has to be revisited
so that one can understand how the island-country has had to struggle to achieve the high
percentages of students registered in both schools and colleges, something that could
definitely change if the pro statehood party in power gets to impose its very inclusive and neo
liberal ideas on education. Yet the new situation could offer private colleges and universities,
which already have a 70% share of the country’s higher education students, a chance to
develop. If they decide to support R & D and do more than simply teach its students, it will
definitely contribute to a university realignment that will change Puerto Rico’s higher
education’s personality.
La dinámica universitaria en Puerto Rico atraviesa por una situación muy especial. La
Universidad de Puerto Rico, que es la universidad pública del gobierno, ha sufrido de paros y
huelgas en estos últimos dos años debido a un aumento de matrÃcula impuesto en contra de la
voluntad de los estudiantes. Mientras tanto, el Gobierno ha nombrado un grupo de trabajo de
ciudadanos identificados con polÃticas neo liberales para que prepare un proyecto de reforma
universitaria que se espera que elimine instancias de participación estudiantiles y profesorales
que habÃan contribuido a democratizar la institución. La historia de la educación en Puerto
Rico, desde la llamada conquista de los españoles, pasando por la invasión de los Estados
Unidos en el 1898, y hasta llegar a estos comienzos del siglo veintiuno con su impactante
recesión económica deben ser repasadas para entender cómo el paÃs ha tenido que luchar para
alcanzar los porcentajes altÃsimos de actividad académica, tanto escolar como universitaria,
que le caracterizan y que se podrÃa trastocar con la situación que se ha creado. En tal
coyuntura, sin embargo, el sector universitario privado, que ya atiende más del 70% de los
estudiantes, tendrá una gran oportunidad de desarrollarse. Si opta por respaldar la
investigación cientÃfica y no se limita a la enseñanza podrá contribuir generosamente a un
realineamiento universitario que cambiará la personalidad de la educación superior
puertorriqueña.