La obra de Paulo Freire, especialmente la PedagogÃa del Oprimido, hace
posible la afirmación de que hacer de la Educación Popular una práctica de EJA
requiere visión social del mundo utópica, proyecto histórico, método, organización,
movimiento, lucha y sujetos dispuestos a construir. Para el autor, la Educación
Popular es práctica de libertad, es acción cultural para la emancipación humana, que
sólo puede ser hecha efectiva por los propios oprimidos. Exactamente eso, el
momento es de afirmar la concepción de la Educación Popular en aquello que la
hace ser Educación Popular, y por lo tanto, ligada a las masas oprimidas.