This paper discusses a certain view of the “decolonial theory†that refuses any pretension of universality to thought, associating this pretension with a necessary Eurocentrism. In contrast to this view, it shows the effective impossibility of the particularism of identities, since they are always conjugated in a network of relationships that make them possible. The idea of a putative original “cultural identity†always represents the temporal crystallization of certain power relations. Thus, an emancipatory policy must radicalize universality, denying the “incomplete†and “abstract†universality of hegemonic groups. Eurocentrism is a particular form of relation between the universal and the particular, and cannot be accepted as the only possible. The correct refusal of European universalism cannot be confused with a refusal to emancipatory universality, which seeks a common perspective that goes beyond particularisms. To this end, those “without part†must constantly challenge the hegemonic idea of universal, which excludes them. If there is no “necessity†in the universal, its contingent construction will result from political struggle.
Este artigo analiza cierta visión de la “teorÃa decolonial†que rechaza cualquier pretensión de universalidad del pensamiento, asociando esta afirmación al eurocentrismo. Contrariamente a esta visión, presenta efectivamente la imposibilidad de particularizar las identidades, ya que estas resultan dentro de la combinación de las redes de relaciones que las posibilitan. La idea de una “identidad cultural†es siempre originada por la cristalización temporal de determinadas relaciones de poder. AsÃ, una polÃtica emancipadora debe radicalizar lo universal, negando la universalidad “incompleta†y “abstracta†de los grupos hegemónicos. El eurocentrismo es una forma singular de relacionar lo universal y lo particular, que no puede ser aceptada como la única posible. El verdadero rechazo al universalismo europeo no puede confundirse con un rechazo de la universalidad emancipadora, más bien debe buscar una perspectiva común que vaya más allá del particularismo. Por lo tanto, los “sin parte†tiene que poner constantemente en tela de juicio la idea hegemónica de la universalidad que los excluye. Si hay una “necesidad†en lo universal, su construcción circunstancial se llevará a cabo en la lucha polÃtica.