Nací siendo, según el paradigma médico, varón. Experimenté, como tantos otros niños y niñas, una transición de género conocida como transexualidad. Transité este proceso a partir de una búsqueda personal, favoreciendo cambios hormonales y anatómicos deseados gracias a una alimentación diferencial. Pasados los años, fui diagnosticada con variabilidad intersexual producida por el tratamiento. Transmito en este trabajo la experiencia sobre los cambios somáticos y anatómicos producidos en mi cuerpo a partir del consumo de agentes botánicos y alimentos, para consolidar una terapia de reemplazo / sustitución hormonal orgánica (TRH/TSH). Al compartir esta experiencia, quisiera aportar desde la antropología discusiones biológicas que buscan poner en tensión las construcciones sexo-genéricas que definen masculinidad y feminidad.