El artÃculo intenta mostrar cómo la mÃstica en Dionisio es el juego del “oximeron†entre lo nombrable y lo innombrable, lo inefable y lo decible, lo conocible y lo inconocible. Por otro lado, muestra que el éxtasis es la posesión en la no posesión, el encuentro en el desencuentro, el estar fuera de sà en el estar en Dios, el estar en Dios sin estar en Dios, la unión en la desunión, el amor pleno del encuentro con Dios gracias a la purificación, la iluminación y la perfección, las tres etapas del ascenso mÃstico extático. Finalmente, se explora el tema de los nombres divinos desde la dialéctica del innombrable omninombrable.